Orion

Cuando te busco, miro las estrellas detrás de la luna,  en un cielo oscuro que alumbra mis pensamientos. La noche es la mejor compañía de las palabras en mi pluma,  se agita tan rápido que se canza al trazar el papel.  Mis letras solo llegarán a ojos de aquellos que se hacen llamar reales humanos. 

Te mezclas con nuestros pensamientos tan firmemente  que, solo pensar en soltarte en duro. Encerrado en un cuarto oscuro, pidiendo ayuda sin  ninguna palabra, eso provocas. En todos estas, y soltarte nos va a liberar, todos tenemos  esa libertad. En todos estas, y en el momento en que te vas, nos ves volar.  Gozo por tenerte y gozo por perderte. 

Kilómetros recorren y su llegada es mágica,  galopando avanzan con su espuma blanca,  en su caída llegará el final de su partida. Regresan con la esperanza de volver a tocar la misma arena. 

Lo has guardado tanto tiempo, que no sabes si desaparecerá. Muchas veces pensando, me hace recordar momentos en mi vida que quisiera borrar. Seguiré soñando con aquel secreto, corriendo en mis sueños para perderlo, y despertando con las mismas preguntas. ¿como? ,  y ¿cuando?, se ira de mi mente. 

Sus canas, son momentos pasados, insertados en lo gris de su color. Es  un baúl de historias por contar y al  mencionarlas te transportan a su edad. El baúl se abre al preguntar, y siempre responde con sinceridad, haz la pregunta y encontrarás las mejores historias que en el pasado están. 

En las noches oscuras muchas veces tras de ti van, no cierres tus ojos que aquellas criaturas en tu mente están. Solo un silbido se escucha, mezclado con los ruidos del viento en aquella noche fría.  Solo escuchas y sigues caminando por el camino que a tu casa te ha de llevar, una puerta abierta a lo lejos se ve, una luz tenue que por apagarse esta. El silbido se hace más fuerte y se acerca al ritmo de tus pasos ¡NO SIENTAS MIEDO! ¡NO SIENTAS MIEDO! Palabras que en tu mente se repiten una y otra vez. El silbido camina junto a ti pero, no sabes dónde está, aquella cosa que por ti va. Casa está muy cerca, empieza a correr que el silbido en silencio esta. En tranquilidad te encuentras al llegar a casa, pero sin ninguna compañía estas, subir al cuarto y encerrarte suena la mejor opción. Las escaleras rechinan como nunca, no encuentras a mamá o papá, pero su cuarto con la puerta abierta está. Cierra tus ojos e intenta dormir, que debajo de tu cama el silbido se ha de o...

Yo solo, sentado en aquel portal, comprendí el por que en la vida nos tenemos que hundir un poco para flotar. Las buenas y malas experiencias que en la vida vivimos, son las que nos dan el poder de nadar, en el tiempo que transcurre sin parar. 

Al caer se me olvido tu nombre, ese nombre tan especial que una vida me tomó encontrar. Toda mi vida en su búsqueda estaré, tu nombre nunca olvidaré, entre todos mis sueños te buscare y no te perderé. No tengo miedo a la oscuridad, cierro mis ojos y te busco para encontrarte en aquel abismo que en mi camino se cruzó. No sientas miedo, que algún día contigo me encontraré, recordando aquel amor que me ha llevado a ti.