No necesito que la lluvia caiga y el sol se esconda, para mirar tus bellos ojos. Con la silueta de la luna como testigo. Si el viento sopla, no importara, en mi mente siempre estarás. En la noche con truenos, los rayos caen cerca, tu ausencia causa el fin de mi existencia. Todo por mirar tus bellos ojos.
Un espacio para escribir grandes historias